Global Journal of Human Social Science, C: Sociology and Culture, Volume 23 Issue 6
Intersubjetividades desarrolladas desde el “ser” construido en relaciones inacabadas, emitidas desde sus prácticas que connotan sus dimensiones de reproducción para su ubicación especifica de demostración de su presencia definida como tiempo y espacio en desarrollo. Por otro lado, como parte de esta intersubjetividad, esta también la comunidad que se la debe asumir como una organización de mutua pertenecía, inclusiva, constructiva, creativa y en movimiento constante, no una simple integración de actores sin intensiones; por el contrario es la unidad representada por una subjetividad desde sus múltiples interrelaciones que se construye, deconstruye o propone activamente otras integraciones; pero siempre en transformación o cambio latente, producto de una intra-inter-trans relación, conocida como movimiento. Lo social como fenómeno construido, o composición de interacciones humanas que se producen para “estar” como ser que se manifiesta y que, a decir de M. Heidegger, podemos definirla como: (…). Los ϕαινόμενα , “fenómenos”, son entonces la totalidad de lo que yace a la luz del día o que puede ser sacado a luz, lo que alguna vez los griegos identificaron, pura y simplemente, con τὰ ὄντα (los entes). Ahora bien, el ente puede mostrarse desde sí mismo de diversas maneras, cada vez según la forma de acceso a él. (…), “fenómeno” en el sentido de “manifestación” o también “blo β e Erscheinung”, “mera manifestación”. (Heidegger; Pag.38-39 www.) Siendo por tanto representaciones, de eterna mutabilidad, producto de los intercambios, interferencias y desarrollo proyectivos de los sujetos, aunque este último “es”, en tanto es “parte de”, cómo presente en una interacción; es decir el sujeto solo es en tanto intersubjetividad. IV. D iscusión Como se señaló hasta ahora, e insistentemente, la subjetividad, no es otra cosa que la manifestación confesa de una intersubjetividad lograda; subjetividad que es igual por tanto, a una producción social creada, producto del conjunto de experiencias enfrentadas por los seres humanos, intencionalmente aplicadas y que germinaron como conciencia, o ser social que se produce, manifestándose a través de las subjetividades producidas, parte de las interrelaciones del cual el ser humano como actor social es parte. Siendo así, la subjetividad es una construcción social que manifiesta una intersubjetividad, o interrelación social que construye al mismo tiempo su propio ser, que le permite definir y desarrollar, un tiempo, una historia, además de una estructura de reproducción y desarrollo social, donde nacieron y desarrollaron como unidades sociales creadas, organizadas como valores, o principios de desarrollo, además de costumbres como practicas identitarias y tradiciones que ayudan a concretizar las relaciones de producción y reproducción social. Proceso que crea, además, desde esa misma intersubjetividad, aunque con otros actores y en otros espacios, de carácter especializado, pero que suman interactivamente la subjetividad colectiva primigenia con la que interactuaron inicialmente, marcando su identidad; pero integrado a otra interrelación especializada, la ciencia, pero como proceso de construcción social. Ciencia que también como todo proceso social construido, esta influenciado, por tanto, por una serie de inter y trans relaciones intersubjetivas, de ahí su definición como proceso de desarrollo compuesto que permite reproducir, prevenir y desarrollar las estructuras sociales con su entorno de convivencia. Ciencia que no deja de ser, parte de las relaciones intersubjetivas de convivencia social cotidiana; pero aplicadas como una actividad de carácter especializado, e intencionalmente desarrollado. Lo que implica que eventualmente, reproducen, comprueban, cuestionan, o mejoran las experiencias y saberes de los constructos sociales con los cuales han convivido inicialmente, pero ahora como actores integrados intencionalmente, pero cargados de una referencia social construida de tiempo y espacio históricamente definido. Pero estas intersubjetividades manifiestas en distintas estructuras y formas sociales, no son parte de relaciones de carácter monolítico, son más bien parte de procesos dinámicos complejos y parte de construcciones diversas que no se replican, solo construyen. Proceso que debe considerar su desarrollo como parte de la realidad, aun esta esta ajena al control de este proceso social construido, pero es influenciado por la misma, siendo este el entorno complejo en el que nos reproducimos, pero también influimos desde nuestra intervención. Realidad que debe ser asumida como: (…) la infinitud de posibilidades de certezas e incertidumbres que generan relaciones de movimiento, es decir de posibles transmutaciones caóticas naturales, u ordenamientos caprichosos como interpretaciones y no como definiciones absolutas; por tanto, todo fenómeno o relación siempre está en movimiento que supone integrar, detenerse y transcurrir constantemente, y estas relaciones nos lleva a concreciones instantáneas dentro la incertidumbre permanente. (Quiroz, 2012: 73). De ahí que ese entorno, es decir la realidad de la que somos parte (contexto natural o relaciones humanas construidas socialmente) se organizan como intersubjetividades. © 2023 Global Journals Volume XXIII Issue VI Version I 39 ( ) Global Journal of Human Social Science - Year 2023 C Apology of Subjectivity, in Science and Social Relations
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